Descripción

Manifestantes esperan que el gobierno anule las concesiones mineras otorgadas en la región Cajamarca y evitar que se sigan contaminado los ríos.
Unos tres mil ronderos empezaron el paro indefinido anunciado contra un grupo de empresas mineras que actualmente se encuentra realizando trabajos de explotación.

La medida de fuerza busca impedir que las mineras obtengan nuevas expansiones en la zona de Hualgayoc-Bambamarca, San Miguel y Santa Cruz, en la región Cajamarca, anunciaron líderes medioambientalistas.

Además indicaron que el sector conocido como “El Empalme” (Bambamarca), virtualmente, se convertirá en su fortín hasta que las transnacionales se retiren y el gobierno se pronuncie sobre el nuevo conflicto social.

Aproximadamente a la una de la tarde de ayer, los más de tres mil ronderos se tendieron en plena carretera impidiendo el libre tránsito hacia la provincia de Hualgayoc, ante la mirada impasible de más de doscientos 250 efectivos de la Dinoes destacados a la zona para mantener el orden conforme dispuso el jefe del Frente Policial de Cajamarca, general PNP Jorge Luis Gutiérrez Sennise.

Por su parte, el consejero regional Guillermo Yopla Murrugarra denunció que la Policía bajó de camiones a un millar de campesinos a la altura La Posada (La Trucha), que se trasladaban desde los centros poblados de San Juan de la Camaca, El Tambo, Huamgamarca y San Antonio, impidiendo que se plieguen a la protesta iniciada en “El Empalme”.

La autoridad afirmó que la medida de fuerza se mantendrá hasta que se anulen las concesiones mineras en la región Cajamarca y desaparezca del organigrama nacional a la Autoridad Nacional del Agua (ANA), asimismo que se descontaminen los ríos y quebradas, repongan las lagunas y la remediación de más de 1,200 pasivos ambientales y la limpieza general de los ríos Tingo, Maygasbamba, Arascorge y Llaucano, que durante más de 500 años –sostiene– vienen siendo contaminados.

La protesta también repercutió en la provincia de Celendín, donde algunos pobladores y ronderos salieron a manifestar su rechazo contra las mineras, en especial contra el proyecto minero Conga; sin embargo, en ningún momento se produjo enfrentamientos con la Policía Nacional.

La atención de los antimineros ahora se concentró en obstaculizar las actividades de las empresas mineras como Gold Fields, Tantahuatay, Coimolache, y La Zanja.

En tanto, la provincia de Cajamarca no sufrió repercusión alguna debido a las protestas que desarrollaron los ronderos, pues las actividades comerciales, turísticas y públicas se desarrollaron con total normalidad.

Hasta el cierre de la presente edición los tres mil ronderos continuaban bloqueando las vías de comunicación.